El Museo Provincial de Artes tuvo presente en vida a Eduardo Ferma a través de obras que forman parte de su colección, de exposiciones y de un homenaje a su trayectoria. Ahora, apenas a unas horas de su fallecimiento, su memoria resuena con una vida dedicada al arte, en la cual no le fue fácil llegar a ser el artista que fue.
De origen humilde, potenció su talento natural estudiando en la Escuela Panamericana de Arte y perfeccionándose con maestros como Melgarejo Muñoz, Alberto Breccia o Hugo Pratt. Grabador, dibujante, pintor, desarrolló una poética basada en las energías de un misticismo cósmico, no importa cuál fuera el tema. Como muy pocos, ha sabido combinar la abstracción geométrica con una figuración propia de la historieta o de la ilustración. Por algo admiraba a Salvador Dalí.
Desde 1974 mostró sus obras en alrededor de 20 exposiciones individuales.
Eduardo había nacido en 1936, en Jacinto Arauz, La Pampa.
Como institución y como integrantes de la comunidad de artistas visuales, sabemos que nuestra responsabilidad será seguir sosteniendo el reconocimiento a este artista singular, contribuyendo a estudiar y difundir su vasta obra.
Un abrazo fuerte a su familia y el compromiso de siempre recordarlo.
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