El consultor ganadero Víctor Tonelli e integrante de la Mesa de las Carnes, propiciada por el Ministerio de Agricultura de la Nación, estuvo el jueves a la noche en la Rural, brindando una charla titulada “Explorando oportunidades en la cadena de ganado vacuno”.
Al ser consultado por El ARGENTINO sobre cómo influye el costo argentino a la cadena cárnica, el consultor manifestó que: “Impacta trasversalmente en todas las actividades productivas, pero más que en la ganadería productiva donde más impacta es en el sector de los frigoríficos. Allí se detectan muchas ineficiencias, como exceso de tasas municipales, impuestos provinciales, nacionales y los costos laborales que son ridículamente caros en la Argentina, para que un obrero reciba 100 pesos al empleador le cuesta 170 pesos en impuestos y es en este aspecto en el que se está trabajando enormemente.
La Mesa de las Carnes hace tiempo que viene poniendo foco en la competitividad y ha encontrado tanto en el gobierno nacional como en la figura del propio presidente Mauricio Macri, mucho interés en trabajar en este aspecto.
En el medio está la política, las necesidades de los sectores más bajos de la población y algunos de los subsidios que hay que seguir manteniendo de lo contrario el costo político sería alto”.
Señaló que: “En este contexto los más afectados son los frigoríficos de exportación porque tienen que competir en sistemas formales, en el caso de los frigoríficos consumeros, todavía le hacen alguna esquivada a la formalidad y de alguna manera compensan parte del costo. En cambio el exportador no puede hacer ese tipo de cosas si o si tiene que transparentar todo”.
El mercado interno
En cuanto al consumo de carnes rojas en la mesa de los argentinos, Tonelli manifestó: “En la Mesa de la Carne ya no hablamos más de carne vacuna sino del conjunto de carnes que está compuesta por la bovina, aviar y porcina. Hoy tenemos que hablar que cada argentino consume en promedio 118 kg de proteína animal por año, sabiendo que el cerdo viene con un envión de 15 kg por habitante año y el pollo que decidió frenar la producción para no destruir la actividad y no saturar el mercado interno, pero está en 45 kg por habitante/año, mientras que la carne vacuna juega como la primera minoría con 56 a 57 kg habitante/año y va para bajo. Vamos a un mercado interno en el que va a estar liderado por la carne de cerdo y de pollo”.
Los mercados externos
Al referirse a los mercados externos dijo que: “Estamos cerca de ingresar al mercado de Estados Unidos, nos queda recuperar el mercado mexicano, Corea del Sur, Japón y habilitar otro tipo de productos en China en la que solo ingresamos con carne congelada deshuesada, pero tenemos que ingresar con carne enfriada, con hueso, menudencias, termoprocesadas. A nuestro país todavía le falta mucho en cuanto a apertura de productos y esta todo por hacer en reducción de aranceles”.
En cuanto a la generación de empleo agregó: “Nosotros tenemos estudiado que si se pasa de los 2,7 millones de toneladas de carne que hoy tenemos en producción a 5 millones de toneladas que es posible, y si de las 300 mil toneladas que este año vamos a llegar a exportar pasamos a 2 millones de toneladas de exportación, en este contexto podremos generar 500 mil puestos de trabajo más entre directos e indirectos, si con el tiempo llegamos a esos volúmenes de producción y comercialización que estimo nos llevará entre 10 a 12 años”, concretó.
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