Lanzan proyecto para la producción de energía de biomasa
El titular de la Administración Provincial de Energía, Carlos Sanz, como representante del sector energético del Gobierno de La Pampa en el Consejo Federal de Energía Eléctrica (CFEE), participó del lanzamiento del proyecto para la promoción de la Energía Derivada de Biomasa que estuvo organizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura y por los Ministerios de Planificación y Agricultura del gobierno nacional.
El programa, que tendrá tres años de duración, tiene como objetivo incrementar la producción de energía derivada de biomasa a nivel local, provincial y nacional. Se pretende asegurar a la sociedad un creciente suministro de energía renovable, limpia, confiable y competitiva, al tiempo que se abren nuevas oportunidades para el desarrollo del sector agropecuario, forestal y agroindustrial del país.
El programa, que tendrá tres años de duración, tiene como objetivo incrementar la producción de energía derivada de biomasa a nivel local, provincial y nacional. Se pretende asegurar a la sociedad un creciente suministro de energía renovable, limpia, confiable y competitiva, al tiempo que se abren nuevas oportunidades para el desarrollo del sector agropecuario, forestal y agroindustrial del país.
Características del proyecto
El proyecto trabajará tres líneas de acción: una dedicada al fortalecimiento institucional y creación de infraestructura necesaria para impulsar el uso sustentable de biomasa para energía; otra, orientada a desarrollar estrategias provinciales para establecer emprendimientos de proyectos bioenergéticos; y la última, focalizada en la realización de campañas de comunicación, sensibilización, extensión y diseminación de informaciones para el fortalecimiento de la política de biomasa.
Estudios previos
Con la asistencia de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y Agricultura (FAO), el gobierno nacional efectuó diversos estudios que dieron muestra del gran potencial de la biomasa como fuente de energía y sus variados beneficios. Sin embargo, incrementar el uso de la biomasa para la producción de energía, implica superar diversos desafíos de orden institucional, legal, económico, técnico y sociocultural.
De acuerdo a lo informado por los organismos nacionales, Argentina es un reconocido productor de materias primas y manufacturas derivadas de sus múltiples actividades agropecuarias, forestales y de sus industrias asociadas. Estas actividades son cada vez más dependientes de insumos energéticos, fertilizantes y agroquímicos cuya gestión provoca considerables impactos ambientales. Asimismo, generan una gran cantidad de subproductos que son una excelente biomasa para la producción de energía renovable, firme y competitiva.
Según se informó en el encuentro, que tuvo como objetivo el lanzamiento del Probiomasa, el fuerte crecimiento económico registrado en el país en la última década, fue acompañado por el aumento del consumo de energía, el cual estuvo basado principalmente en los combustibles fósiles, cuyos precios internacionales elevados y volátiles, desafían al conjunto del aparato productivo.
Las consideraciones sobre las dimensiones económica, social y ambiental del desarrollo sostenible asociadas a los mismos, son motivo de creciente análisis.
La política energética fijada por el gobierno nacional considera estos aspectos y por ello brinda más espacio a las energías renovables, incluyendo la producción de energía partir de biomasa, contemplando, de esta manera el éxito alcanzado por el país como productor internacional de biocombustibles.
De acuerdo a lo informado por los organismos nacionales, Argentina es un reconocido productor de materias primas y manufacturas derivadas de sus múltiples actividades agropecuarias, forestales y de sus industrias asociadas. Estas actividades son cada vez más dependientes de insumos energéticos, fertilizantes y agroquímicos cuya gestión provoca considerables impactos ambientales. Asimismo, generan una gran cantidad de subproductos que son una excelente biomasa para la producción de energía renovable, firme y competitiva.
Según se informó en el encuentro, que tuvo como objetivo el lanzamiento del Probiomasa, el fuerte crecimiento económico registrado en el país en la última década, fue acompañado por el aumento del consumo de energía, el cual estuvo basado principalmente en los combustibles fósiles, cuyos precios internacionales elevados y volátiles, desafían al conjunto del aparato productivo.
Las consideraciones sobre las dimensiones económica, social y ambiental del desarrollo sostenible asociadas a los mismos, son motivo de creciente análisis.
La política energética fijada por el gobierno nacional considera estos aspectos y por ello brinda más espacio a las energías renovables, incluyendo la producción de energía partir de biomasa, contemplando, de esta manera el éxito alcanzado por el país como productor internacional de biocombustibles.
Resultados esperados
El gobierno nacional prevé incorporar en la primera etapa del proyecto, 200MW eléctricos y 200 térmicos, lo que implicaría incrementar el consumo actual de biomasa en 4 millones de toneladas equivalentes de petróleo, lo cual significará que la participación de la biomasa pasará de 3,5% a 10% de la oferta interna de producción de energía.
Se espera diversificar la producción, aumentar la rentabilidad y mejorar la productividad de las actividades agropecuarias, forestales y de sus industrias asociadas mediante el aprovechamiento de los subproductos para la producción energética.
Con este proyecto, se estima la generación de unos 60 mil puestos de trabajo, mejorar la calidad de vida de unas 30 comunidades, diversificación económica y la extensión de procesos de inclusión social.
En cuanto a lo ambiental, el Probiomasa evitará la emisión anual de 9,5 millones de toneladas equivalentes a CO2, minimizará los efectos negativos de la disposición inadecuada de residuos con beneficios locales derivados de la reducción de la contaminación de cursos y cuerpos de agua, suelos y de la ocurrencia de incendios.
El proyecto también funcionará como catalizador de un proceso innovador que inicie la implementación de "biorefinerías" para la producción integrada de alimentos, energía y químicos derivados de biomasa, con el consiguiente desarrollo de los territorios involucrados.
De esta reunión participaron representantes del Ministerio y Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca; Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, representantes de la Secretaría de Energía de la Nación y autoridades representantes de las provincias en el Consejo Federal de Energía Eléctrica.
Se espera diversificar la producción, aumentar la rentabilidad y mejorar la productividad de las actividades agropecuarias, forestales y de sus industrias asociadas mediante el aprovechamiento de los subproductos para la producción energética.
Con este proyecto, se estima la generación de unos 60 mil puestos de trabajo, mejorar la calidad de vida de unas 30 comunidades, diversificación económica y la extensión de procesos de inclusión social.
En cuanto a lo ambiental, el Probiomasa evitará la emisión anual de 9,5 millones de toneladas equivalentes a CO2, minimizará los efectos negativos de la disposición inadecuada de residuos con beneficios locales derivados de la reducción de la contaminación de cursos y cuerpos de agua, suelos y de la ocurrencia de incendios.
El proyecto también funcionará como catalizador de un proceso innovador que inicie la implementación de "biorefinerías" para la producción integrada de alimentos, energía y químicos derivados de biomasa, con el consiguiente desarrollo de los territorios involucrados.
De esta reunión participaron representantes del Ministerio y Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca; Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, representantes de la Secretaría de Energía de la Nación y autoridades representantes de las provincias en el Consejo Federal de Energía Eléctrica.
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