Soja: ni los dólares de una súper cosecha podrían eliminar el cepo cambiario en 2013
El año que viene el sector agropecuario aportará al Gobierno nacional una suma mucho mayor a la de 2012 a partir de una producción de soja prevista en al menos 50 millones de toneladas. Esto permitiría aliviar las restricciones cambiarias, pero no eliminarlas. La baja inversión extranjera y la imposibilidad de acceder al crédito internacional aparecen como los principales problemas.
Algunos funcionarios de alto rango del Gobierno nacional están esperanzados en poder aliviar –al menos un poco- las restricciones cambiarias que han venido implementando en los últimos meses de cara a las elecciones legislativas del año que viene.
Para lograr este objetivo, en el núcleo duro del kirchnerismo confían en que en 2013 se registre una muy buena cosecha agrícola con altos precios internacionales que generen un aluvión de divisas a las arcas fiscales.
El tema es que, según pudo saber La Política Online, la economía argentina seguirá registrando problemas estructurales de oferta de dólares por la baja inversión extranjera y la imposibilidad de acceder a los principales mercados internacionales de crédito.
Es decir, ni una súper cosecha agrícola 2012/13 –tal como todo hace preveer- permitirá al Gobierno comenzar a flexibilizar el cepo cambiario que instrumentó para encubrir la devaluación directa del peso argentino en relación al dólar estadounidense.
“El principal problema que tiene la economía es que no hay políticas de aliento a la inversión extranjera directa con apertura al crédito internacional”, comentó Verónica Sosa, especialista de la consultora Economía & Regiones.
“En 2013 el tipo de cambio nominal oficial continuaría depreciándose unos 10 puntos porcentuales por detrás de la inflación y el Gobierno nacional devaluaría diferenciadamente aplicando impuestos sectoriales”, advirtió Sosa.
Para la especialista, las trabas que impone el kirchnerismo a la compra de dólares al sector privado “se explican por la necesidad de cerrar su caja en dólares, comprar importaciones y pagar dividendos, utilidades, intereses y amortizaciones al exterior”.
En este contexto, cabe esperar que el Banco Central (BCRA) que dirige Mercedes Marcó del Pont continúe financiando al sector público de manera tal que se seguirán consumiendo reservas (estimadas en torno a los 46.000 millones de dólares).
En 2013 se espera que el sector agroindustrial aporte aproximadamente 5000 millones de dólares a la economía a partir de una cosecha de soja prevista en al menos 50 millones de toneladas (10 millones más que en 2011/12), según valorsoja.com.
En tanto, para el consultor rosarino, Salvador Di Stefano, “con las actuales cotizaciones de la soja y el maíz, el año que viene el ingreso de dólares al país será tan abundante que podrían calmarse los problemas en el mercado cambiario, pero no eliminarse”.
“En 2013 es probable que el contexto mundial mejore y esto inevitablemente lo sentirá el mercado doméstico: además, la Argentina se encontrará con una mejora sustancial en el precio de las materias primas y Brasil crecerá, ayudando a nuestro crecimiento”, dijo.
Di Stefano consideró también que “la suba de las materias primas agrícolas genera un efecto inflacionario que será difícil de detener. El aumento del maíz se siente en los precios de las carnes, y en la cadena de negocios que los desarrollan. El mix de suba de precios y pérdida de rentabilidad se comienza a percibir plenamente en el mercado”.
Así las cosas, en la jornada de este lunes la soja cerró a u$s 613 por tonelada en el Mercado de Chicago registrando una pérdida de casi u$s 26 con respecto al viernes. En el ámbito local, en tanto, se pagó $ 1930, unos $ 60 menos que en el cierre anterior.
En este sentido, según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), “la caída se debió a una liquidación de posiciones, apoyada en el avance de los trabajos de cosecha en EE.UU. y las perspectivas de clima favorable en Sudamérica”.
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