Granos: “Si liberan los controles, duplicamos la cosecha”

Lo aseguró el vicepresidente de CRA, Pedro Apaolaza. “Si hay que pedir permiso cada vez que el productor quiere vender, la actividad se torna imposible”, dijo.

Pedro Apaolaza, vicepresidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), sostuvo que si el Gobierno se decidiera a “liberar los controles” que ejerce sobre las exportaciones de granos, el sector “duplicaría la cosecha”.

En declaraciones a Radio La Plata, el ruralista afirmó: “Hoy no tenemos trigo y vamos a tener menos maíz que el año pasado. Uruguay nos acaba de reemplazar como principal exportador de leche a Brasil. El país ha perdido u$s6.000 millones”.

Este cuadro de situación al que, señaló, se llegó luego de diez años de política agroganadera kirchnerista, se completaría con las trabas al comercio que pesan sobre los productores. Según dijo, se llegó al punto de que éstos “no puedan vender” la cosecha por falta de autorización.

Apaolaza explicó que si el productor siembra trigo pero debe guardarlo porque el Gobierno no se lo deja comercializar a menos de que sea permitido, “la actividad se torna imposible”.

“Es una situación a la que el campo se ha sometido. Cada vez que vendemos tenemos que ir a pedir permiso, es un tema complicado. Hay que normalizar este país de una buena vez por todas; el tema es que hay que buscar funcionarios que estén dispuestos a escuchar”, consideró el dirigente ruralista.

Una de las medidas que, opinó, es fundamental es la liberación del mercado del trigo. “Hay que liberar el mercado de trigo, terminar todos los controles y nosotros le prometemos una cosecha que se pueda multiplicar, así se ha hecho siempre“, opinó.

“Hoy para vender trigo -agregó Apaolaza- hay que pedir permiso, pedirle al Estado que nos deje vender 200 toneladas de trigo, sin ese permiso no podemos exportar. Entonces a muchos productores les sigue pasando que tienen el trigo dos o tres años guardados ahí“.

En ese sentido, criticó también la actual política de otorgamiento de los ROEs (Registros de Operación de Exportación): “A algunos exportadores les dan el permiso, a otros no, y cuando jugamos a estas cosas con un tema tan serio que tiene la economía pasan estas cosas. Hay 6 o 7 exportadoras que son las que trabajan con todo el tema del trigo“.

Debido a esta situación y a la creciente inflación, “al productor lo están obligando a especular y a ahorrar en soja, dado que lo mejor que puede hacer es tener a la soja como moneda de cambio”, concluyó Apaolaza.